La Fuerza del Rozamiento

09/21/05

La Fuerza de Rozamiento.

Al principio se nos coló como un concepto básico, instintivo, "las cosas se frenan porque se rozan", y todo parecía tan genial como una postal.

Al tiempo, se destapaba como un poderoso concepto, que empezaba a susurrarte la verdadera profundidad de la física real, como mundo coexistente y codificado tras una membrana de acciones y reacciones. Se te definía toda materia como una composición microscópica de riscos picudos y valles abismales, que con esfuerzo avanzaban, a pesar de la tendencia de las grietas a encajar unas con otras.

Ahora, pienso en penetrar en los microabismos del espejo, y como cuestión de voluntad, deconstruirme en un cálido mar de dolor carnal y percepción histérica y musical, sólo para comprobar si soy yo, si eres tú, si es algo.

Porque los valles de los cristales y espejos parecen un buen lugar donde esconder los secretos que enlazan la percepción sensorial con la transcendencia espiritual, que hacen que todo encaje entre tanto saliente y entrante.

Y hallados, tal vez poder seguir buscando en las profundidades de lo inalcanzable. Según parece, no hay nada mejor descubierto.